Estos cursos de formación están especialmente dirigidos a los sacerdotes ordenados en los últimos diez años y los seminaristas, aunque están abiertos a todos los presbíteros. Suponen un acompañamiento más cercano a quienes se inician en el ministerio y buscan responder a los retos apostólicos del mismo. Se imparten en sesiones de mañana y tarde. Los ya ordenados tienen la opción de comer y/o alojarse en el Seminario durante el curso.