Presentación de la memoria de actividad de 2016 de Red Íncola

Desde 2016 están centrados en una inclusión total uniendo la asesoría educativa y de formación con las labores de inserción laboral para conseguir trabajos más estables y mayores oportunidades de futuro.

Las áreas de trabajo de Red Íncola. A pesar de la disminución de beneficiarios respecto al año anterior desde Red Íncola reconocen que la ruptura social cada vez es más grande, algo que notan porque las personas cada vez solicitan más servicios, como por ejemplo estar más tiempo beneficiándose del servicio de vivienda, dado que no les resulta fácil conseguir una autonomía económica. Aunque ha aumenta el número de personas que han conseguido trabajo gracias a la bolsa de empleo, 202 en 2016, por desgracia son empleos temporales por lo que pasados seis meses vuelven a necesitar utilizar esos recursos. Entre los trabajos más estables se encuentra el empleo doméstico y debido a sus condiciones y baja remuneración es complicado mantener una familia.

Otra de las iniciativas cada vez más demandada es la de mediación cultural. Cada día son más las personas de habla árabe que solicitan los servicios de un traductor para realizar labores cotidianas que implican socialización, como acudir a una cita con el médico o ir a una reunión del colegio.

Red Íncola cuenta con un presupuesto de 223.000 euros, de los cuales un 40% se destina a infancia y juventud, desarrollando un modelo de acompañamiento y maduración que va más allá de la asesoría educativa, a través de actividades lúdicas y de tiempo libre. Esta iniciativa está pensada para acompañar a los niños y adolescentes en el proceso de adaptación cuando las familias no pueden por falta de tiempo, conocimiento, o recursos.

De julio a septiembre está abierto el plazo de donaciones para becas. Red Íncola pretende conseguir 27.000 euros para mantener las 45 becas de 600 euros para ayudar a las familias con el comienzo del curso escolar.