Los técnicos prueban la iluminación de la nueva cúpula de la Iglesia de la Vera Cruz con la previsión de entregar la obra este viernes

Los técnicos prueban la iluminación de la nueva cúpula de la Iglesia de la Vera Cruz con la previsión de entregar la obra este viernes

19 febrero, 2025

67 días laborables. Desde que comenzaron las obras, hasta que el pasado martes, 18 de febrero, los técnicos llevaron a cabo las pruebas de iluminación en la nueva cúpula de la Iglesia Penitencial de la Santa Vera Cruz, paso previo al desmontaje del andamio central y la entrega de la obra a la Cofradía propietaria del céntrico templo vallisoletano. Una entrega de llaves prevista para este viernes, 21 de febrero.

Quien lleva la cuenta de los días es Javier Rivero, jefe de obra, que agradece a los profesionales y a los proveedores de materiales haberse “volcado” para cumplir con el calendario y que el templo pueda reabrir sus puertas antes de la Semana Santa de 2025.

Pasadas las siete de la mañana, antes del amanecer, los técnicos de Altertec Energy Solutions, encargados de la instalación, y Rodrigo Diosdado, de Rogo Iluminación subían a la nueva cúpula, donde se han instalado luminarias con tecnología LED, formando “un perímetro con luz asimétrica para dar la misma uniformidad y la misma cantidad de luz” a toda la infraestructura.

Era necesario, según explica Diosdado, este último trabajo en altura antes de desmontar el andamiaje para “orientar” esas luminarias y ayudar, así, a “minimizar” las “posibles sombras” generadas por el impacto de la luz artificial sobre las paredes y las molduras de la cúpula.

La nueva cúpula dispone de 18 luminarias de unos 90 centímetros de longitud cada una. En la parte inmediatamente inferior, denominada tambor, se ha optado por instalar una tira de led continúa, también con “un sistema óptico”, puntualiza Diosdado, “para bañar de forma uniforme el paramento vertical”. Además, la tecnología empleada dispone de “un anillo que nos permite compensar la parte de luz de la parte superior (del templo) con la de la parte inferior”. “No es una tira de LED al uso”, concluye, sino “de alta potencia y con óptica”.

En su conjunto, las nuevas luminarias suman entre 500 y 600 watios de luz cálida. “Suficiente” para una construcción de este tipo, sentencia Diosdado.

La iluminación de la nueva cúpula de la Vera Cruz puede controlarse, además, en remoto. De tal manera que “la bombilla está en el espacio que tenemos que iluminar”, explica Diosdado, “pero la fuente de iluminación y la tecnología” se encuentran ubicadas en otro punto más accesible de la Iglesia, lo que permitirá que “si el día de mañana se estropea una de las piezas electrónicas”, los técnicos la tendrán “a nuestra mano sin necesidad de subir a un andamio o de echar mano de una pluma para llegar a ella”.

Pese a haber contado con “la última tecnología”, en la parte superior de la cúpula, denominada linterna, se ha optado por no instalar iluminación artificial por “motivos técnicos” que harían excesivamente complejas la llegada de cableado, así como futuras sustituciones de piezas o reparaciones.

Con las primeras luces del amanecer, los iluminadores dejaban paso a los operarios encargados de desmontar el andamio levantado sobre el crucero del templo al inicio de las obras y a los restauradores, que ultiman la limpieza del polvo caído sobre los retablos laterales y que esperan ya el regreso de las imágenes devocionales.