La parroquia de San Nicolás de Bari ha vuelto a conmemorar a San Miguel de los Santos con una novena en su honor y la celebración de la festividad, mañana viernes, a las 20h. Además, tras la eucaristía, los fieles tienen la oportunidad de besar la reliquia del santo catalán, que falleció en Valladolid y fue enterrado en ese templo. Su fiesta, el 5 de julio, es memoria obligatoria en la Diócesis de Valladolid.
San Miguel de los Santos nace en Vic el 29 de septiembre de 1591. Desde muy pequeño siente la inclinación a la vida religiosa, pero encuentra muchas dificultades porque, por su corta edad, sus tutores se lo impedían. Sobre los doce años toma la decisión de irse a Barcelona para hacerse religioso.
El 30 de septiembre de 1607, apenas cumplidos los dieciséis años hace profesión religiosa en la orden Calzada de la Santísima Trinidad. Durante sus años de estudiante recorre varias ciudades. No hay datos claros de su ordenación sacerdotal que parece que se realiza en la ciudad de Faro (Portugal).
En 1622, a pesar de la oposición de los consejeros, el Vicario General de la orden nombra a Miguel de los Santos superior del convento de Valladolid, donde llegará en junio. Pronto se extendió su fama de santidad, que hizo llegar al convento a muchas personas buscando su ayuda y consejos. Muere el jueves 10 de abril de 1626 y sus restos se conservan en el templo de san Nicolás.
Javier C. Gómez, párroco de San Nicolás.