La Archidiócesis de Valladolid preparada para abrir el Jubileo 2025

Año Jubilar, también conocido como “Año Santo”, es un año especial en la vida de la Iglesia que en la actualidad se celebra cada 25 años. Un tiempo, apunta el Papa Francisco, que espera “ser un encuentro vivo y personal con el Señor”, a quien la Iglesia tiene la misión de “anunciar siempre” como “nuestra esperanza”. El Jubileo 2025, ‘Peregrinos de Esperanza’ dio comienzo en la víspera de Navidad en Roma, en las diócesis se procederá a la Apertura de este año de gracia el próximo domingo 29 de diciembre, como así lo ha dispuesto el Santo Padre.

La Archidiócesis de Valladolid está preparada para vivir este gran acontecimiento que arrancará a las 18:30h. con un acto litúrgico en la iglesia de San Andrés tras el que partirá la procesión hasta la Basílica Santuario Nacional de la Gran Promesa, templo jubilar junto a la Catedral y la Capilla del Hospital San Benito Menni. Una vez allí, alrededor de las 19:30h. dará comienzo la celebración de la Misa de apertura presidida por el arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, don Luis Argüello.

Durante el Jubileo, desde su apertura diocesana hasta su clausura el 6 de enero de 2026, todos los fieles verdaderamente arrepentidos podrán lograr la indulgencia plenaria, cumpliendo las tres condiciones acostumbradas: confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intercesiones del Santo Padre.

2025 años del nacimiento de Cristo

Un “año de júbilo” para celebrar “los 2025 años del nacimiento de nuestro Salvador” y con el que el Santo Padre nos anuncia que “Cristo es nuestra esperanza”. Por ello, la principal intención de este año jubilar es el que “todos”, apunta el vicario general de la Archidiócesis de Valladolid, Jesús Fernández Lubiano, “podamos tener un encuentro vivo y personal con Jesucristo” en un momento tan significativo para la Iglesia universal en el que se nos invita a profundizar tanto en la dimensión “espiritual” como “social” que nos ofrece el Jubileo 2025.

Celebración del primer Concilio de Nicea

Este Año Jubilar ‘Peregrinos de esperanza’, tiene algunas características especiales, coincidiendo con los 1700 años de la celebración del primer Concilio de Nicea en el 325, un hito en la historia de la Iglesia, en el que se “proclama la verdad de Jesucristo”. Precisamente, unir que es “verdadero Dios y verdadero hombre”, es lo que quiso “proclamar” este concilio, para “asumir la naturaleza humana de Cristo” con todo lo que implica en la “vida de la fe” y en la “compresión del ser humano”.

Un Jubileo que pretende hacer rebrotar la esperanza con la intención de revertir “los signos de desesperanza” latentes en nuestro mundo actual. De hecho, en nuestra diócesis se van a tener muy en cuenta las palabras del Santo Padre en la Bula de convocación de este Jubileo, en la que insiste en “hacer una lectura” para detectar “donde hay esperanza, donde falta y donde hay que ponerla”. Por este motivo, “las actividades habituales” que se realizan a lo largo del curso pastoral en la Archidiócesis vallisoletana, puntualiza Fernández Lubiano, incidirán “en las indicaciones que nos hace el papa Francisco”, buscando signos que ofrezcan la oportunidad de “avivar la esperanza en aquel que la tiene débil o que la ha perdido”.