El pasado 1 de noviembre, día de todos los Santos, en la localidad de Pedrosa del Rey, por iniciativa del Alcalde D. Ramón Fernández Meléndez, se hizo un emotivo homenaje a todos los difuntos de la villa.
La gente, al igual que otros años, acudía al cementerio, a lo largo del día a hacer sus rezos y depositar sus ramos y centros de flores a sus seres queridos. Pero este año, algo nuevo ha hecho que fuera un día especial. A parte de llevar las flores en diferentes momentos del día, se ha conseguido que por la tarde-noche la gente se reuniera de nuevo, y juntos, como una gran familia, rindiéramos un homenaje a todos nuestros hermanos difuntos en el día de Todos los Santos.
Fue un acto muy emotivo y entrañable, al que se sumaron más de un centenar de personas. Todos, y con un gran respeto, iniciamos el acto con el rezo del Santo Rosario. Y a continuación, con la colaboración de mayores y pequeños, se distribuyeron 1000 velitas por todos los pasillos del cementerio, y alrededor de las sepulturas y panteones, para iluminar a todos y cada uno de nuestros seres más queridos: padres, abuelos, hermanos, amigos, vecinos… Aquéllos que compartieron parte de sus vidas con nosotros y que ya no están.
El cementerio, a la luz de las velas y con la expectación de la gente, se convirtió en un lugar acogedor y entrañable, que invitaba al silencio y la oración. Un lugar donde todo el mundo se sentía a gusto y feliz. Un lugar donde se respiraba paz y fraternidad.
Para terminar el acto, todos juntos compartimos unas oraciones, una lectura del Evangelio de Juan y rezamos un Responso delante de la Cruz que el Ayuntamiento ha instalado representando a todos los difuntos allí enterrados, en el que se lee: “Esta sepultura guarda tu cuerpo, Dios tu alma y tus familiares tu recuerdo”.
La velas permanecerán encendidas día y noche, durante varios días, hasta que se consuma. Mientras tanto, la gente nos sumamos a este homenaje y seguimos acudiendo al camposanto a recordar y rezar por nuestros seres queridos, esperando que gocen ya de la presencia viva del Señor.
Mª Teresa García Pinto
Fotografías de Juan Carlos Rodríguez Ramos