El Arzobispo de Valladolid presidirá la misa funeral por el padre Teófanes Egido (OCD)
17 julio, 2024El Arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, don Luis Argüello, presidirá la misa funeral corpore insepulto (de cuerpo presente) por el eterno descanso del padre Teófanes Egido (OCD), fallecido este 17 de julio a los 88 años de edad.
Don Luis Argüello regresará desde Ciudad Rodrigo (Salamanca), donde desde hoy se está celebrando el tradicional encuentro de trabajo de los obispos y vicarios de la Iglesia en Castilla, para presidir la misa funeral que se celebrará este jueves, 18 de julio, a las 11:00 horas en la Iglesia Conventual de San Benito el Real. La homilía será pronunciada por el padre Luis Javier Fernández Frontela, miembro también de la Provincia Ibérica de los Carmelitas Descalzos y quien ha recordado en un obituario la figura del carmelita descalzo, catedrático y maestro de historiadores, cronista oficial de la ciudad de Valladolid entre 2001 y 2018 y Premio Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades en 2020.
La capilla ardiente estará instalada desde las 15:00 horas del 17 de julio en el Tanatorio de Las Contiendas. Concluida la misa funeral mañana, jueves, los restos mortales del padre Teófanes Egido (OCD) serán inhumados en el Cementerio de El Carmen de Valladolid.
Teófanes Egido: el carmelita “humilde”, el cronista “intrépido”
En el mes de abril de 2019 la ciudad de Valladolid rendía homenaje a este carmelita “humilde”, como lo definen quienes le conocían, que ejerció también como “intrépido” cronista de la ciudad de Valladolid.
Aquel homenaje se plasmó en la presentación por sorpresa para su protagonista de un libro, ‘La mirada de Teófanes Egido, cronista de Valladolid’, publicado por el Ayuntamiento de Valladolid dentro de la colección ‘Autores vallisoletanos. Serie Contemporáneos’ y coordinado por el historiador Javier Burrieza, discípulo y amigo personal del padre Teófanes Egido.
El padre Teófanes Egido nació el 1 de abril de 1936, ingresó en el Seminario de Medina del Campo en el año 1947 e hizo su profesión religiosa en Segovia el 2 de agosto de 1952. Posteriormente, la profesión solemne, el 25 de julio de 1957. Fue ordenado el 2 de abril de 1960. Desde ese año fue miembro de la comunidad de los Carmelitas Descalzos de Valladolid, donde desarrolló una fecunda labor en el Centro de Estudios Josefinos. Como historiador, destacó por su labor en torno a la figura de Santa Teresa de Jesús y su contexto, así como por sus aportaciones para la comprensión de la propio Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, pero dejó su impronta en muchos otros ámbitos de la historia eclesiástica y civil.