Bienvenida a la imagen peregrina de la Virgen de Fátima
9 junio, 2017Don Luis Argüello arzobispo auxiliar recibió a la imagen peregrina de la Virgen de Fátima en la S. I. Catedral de Valladolid, acogió junto a los fieles la llegada de la Virgen que nos invita a acercarnos a Jesús y a coger su misericordia llamándonos a la penitencia.
La visita que ha tenido lugar por el centenario de Nuestra Señora de Fátima ha cumplido los deseos de muchas personas que no han podido acudir a visitarla en un momento tan señalado. A lo largo de la celebración se desarrolló el propio culto de Fátima, comenzó con el rosario seguido de las letanías, a continuación, el delegado nacional de pastoral del apostolado mundial de Fátima en España, José Manuel Lozano, explicó el mensaje de Fátima, seguido por la consagración de don Luis Argüello a los asistentes. Para concluir, tuvo lugar la procesión, al igual que si se hubiera estado en Fátima, los fieles acompañaron a la Virgen donde estaba su hijo esperándola, así fue acogida en el Santuario de la Basílica de la Gran Promesa para su veneración.
El mensaje de Fátima. José Manuel Lozano explicó que la Consagración al Corazón Inmaculado de María significa, reconocer con humildad que por nosotros mismos no podemos vivir la voluntad de Dios ni cumplir sus mandamientos. “Sin Dios y la Virgen no podemos vivir en plenitud la vocación cristiana que no es otra que ser imagen de Jesucristo” precisó. La vida de María fue un hágase en mí, que se haga la voluntad de Dios en mí, y esa es la invitación que nos hace el señor a través de su madre.
El delegado nacional de pastoral quiso destacar la importancia del Corazón de Jesús en Valladolid y la similitud que tiene con el Corazón Inmaculado de María. En Valladolid se venera con especial devoción el Corazón de Jesús, el corazón clavado de espinas por las ingratitudes que le hacen en el mundo entero y con el que se apareció a Santa Margarita y le pidió consuelo en el siglo XVII. Tres siglos después se aparece la madre de Dios en Portugal y en Tui, que invita también a que le ayuden a reparar tantas ofensas, pide que se tenga compasión de su corazón. Lo mismo que pide Jesús con su corazón sagrado lo pide María con su corazón inmaculado.
Don Luis Argüello durante la consagración apeló a la presencia maternal de Nuestra Señora de Fátima, aclamando “Acoge con benevolencia le acto de consagración que hacemos con confianza ante esta imagen tuya, estamos seguros que cada uno de nosotros es precioso a tus ojos y que nada de lo que habita en nuestros corazones es ajeno a ti.